lunes, marzo 22, 2010

Ingeniería cultural

Leo a Osvaldo Nemirovski:

- "De que le sirve (la norma japonesa/brasilera de TV digital) a la Argentina?
- "En lo social para poner nuevos jugadores en la oferta de contenidos e ir cambiando el gusto cultural de los argentinos"

Osvaldo es el Coordinador del Consejo de la Televisión Digital Argentina. Osvaldo cree, creo que sinceramente, que el Estado puede y debe cambiar el gusto cultural de los argentinos. Cree que más oferta de medios va a hacer que la gente cambie a Tinelli por Prokofiev, a Mirtha por Foucalt y a Pergolini por Deleuze. Cree que eso es bueno, lo cual es discutible, pero para peor, cree que es posible.

Le recuerdo a Osvaldo que los argentinos pasaron de tener 4 o 5 canales (todos locales) a tener entre 35 y 200, incluyendo algunos de los mejores canales culturales de la TV mundial. Eso sucedió cuando se popularizó el cable en el país en los 90s. Sin embargo no vi ningún cambio sustancial en los gustos. Los que veían boludeces en canal 11, agregaron a esas boludeces algunas importadas. Los que veían documentales en el 7, pudieron ver más y mejores en Discovery et al. Pero nadie dejó de ver Tinelli para ver la transmisión de una ópera de Puccini en canal A.

Además, me cuesta creer que más canales implique mejores contenidos. Lo que va agregar es una diversidad de contenidos de segunda calidad, sin escala como para perdurar sin asistencia del estado.....

Ingeniería social. Siempre fue una idea propia de académicos poco conectados con la realidad. Lo increíble es que ahora hay experiencia que demuestra la futilidad de ese tipo de esfuerzos, y sigue existiendo gente que cree que es posible hacer este tipo de experimentos y que rindan algún tipo de frutos.

Realmente prefiero creer que la ley de medios se hizo por alguna mezquina venganza política y no para intentar cambiar los gustos culturales. Al menos demostraría una sombra de racionalidad.

jueves, marzo 18, 2010

Inflación y uso de capacidad instalada

Siempre me resultó sospechosamente trivial la idea de que la inflación tuviera como causa fundamental un elevado uso de la capacidad instalada industrial. Me parece que si la industria representa el 25% del PBI es un poco osado usar ese indicador como proxy de la capacidad de oferta de la economía.

En una segunda vuelta, también me parece que, de existir una relación entre ambas variables, la ocupación de la capacidad instalada siempre sería un síntoma de una causa más profunda (oh Aristóteles y tus 4 causas...)

Pero lo que más ruido me hace es que mientras existe cierta evidencia empírica de la relación entre emisión e inflación, y esa evidencia intenta validar la existencia de un mecanismo relativamente bien explicado que vincula la emisión con la inflación en todo tipo de economía y en diversos momentos históricos, nunca he encontrado una vinculación robusta cuantitativa entre UCI e inflación, y menos aún un mecanismo que explique el vínculo entre ambos.

Dado que la inflación es un fenómeno sistémico (es el aumento GENERALIZADO y SOSTENIDO de los precios), es difícil entender como un alto nivel de UCI puede producir ese fenómeno. La UCI es el promedio ponderado del uso de distintas unidades de producción. Y encubre una gran variabilidad interna, tanto en el uso de esa capacidad (e.g. una planta de aluminio funcionando al 83%, una tornería al 63% y una inyectora de plásticos al 94%), como en el impacto que dicho uso tiene en los costos de producción y en la capacidad de satisfacer la demanda en cada caso. Y, mucho más sorprendentemente, como eso afecta el precio de la acelga (desestacionalizado) o el costo de la hora del service de la PC.....El mecanismo de transmisión me parece sospechosamente mal explicado o dado como obvio, cuando no lo es para nada.

Entonces me crucé con un papercito de un researcher del Federal Reserve Bank of Dallas y un estudiante de la SMU. Algo viejito, aplicado solo a USA, pero que, con unas poquitas y sencillas regresiones ponen en duda tal vínculo. Para los que se aburren leyendo este tipo de cosas, les transcribo algunas de sus conclusiones:

During recent years, the reliability of the unemployment and capacity utilization rates as future inflation indicators has come under question (avisenle a algunos economistas locales sobre estas dudas....el paper es del 97!)

Because the usefulness of these indicators is predicated on a stable short-run trade-off between real activity and inflation, this scrutiny has entailed a reexamination of the Phillips curve. (....)
We find evidence that although capacity utilization had significant predictive power for changes in consumer price inflation before 1983, this relationship has substantially weakened since the end of 1982. In fact, after 1982 there is no evidence that high capacity utilization rates forecast increases in consumer price inflation. (...)

There are a number of possible explanations for the deterioration in the ability of capacity utilization to forecast changes in inflation, including potential mismeasurement of capacity utilization (imaginense si ese es un tema en USA, lo que es acá....yo llenaba unas planillas sobre ese tema hace 22 años y era cualquier cosa!), and an increasingly global economy. (no necesito comentar que ese tema es mucho más fuerte ahora).

Another potential explanation for the deterioration in the forecasting relationship is that the conduct of monetary policy has changed (...) many analysts have argued that the Federal Reserve has been more forward-looking and quicker to bring inflation pressures under control during the 1980s and 1990s than during the late 1960s and 1970s. If the Federal Reserve is now quicker to tighten policy in response to such indicators as rising capacity utilization rates, these indicators may no longer be followed by rising inflation, simply because the Federal Reserve has already tightened policy and brought inflation pressures under control (esta explicación me parece un poquitín self serving....pero indica que es finalmente la política monetaria la que define el nivel de inflación: sin una adecuada política monetaria, toda presión inflacionaria por falta de capacidad pasa de potencial y limitada a real y extendida)

La pregunta es: nuestro Banco Central se anticipará a las presiones inflacionarias creadas por una mayor UCI? Y como fue que con UCIs en caída tuvimos una inflación del 15% el año pasado? (no me vengan con el impulso fiscal, que en USA fue mucho mayor y no llegan a la mitad de esa inflación....lo que indicaría que a nuestro impulso se le fue la mano)

miércoles, marzo 17, 2010

Inflación, memoria y olvido

Es raro que a un gobierno que ha hecho de la recuperación de la memoria de ciertas atrocidades no solo una política de gobierno sino casi un cliché, le resulte tan difícil recordar lo que la inflación hizo de este país durante décadas. O peor, que repita argumentos que ya eran bastantes endebles hace 45 o 50 años atrás ("un poco de inflación es necesario/inocuo/irrelevante"), olvidando que esos argumentos son los que llevan al sapo a no salir del agua hirviendo.

Pero también me resulta asombroso que a pesar de ser el país con la mayor tradición inflacionaria del mundo moderno, nuestros economistas aún no se pongan de acuerdo con respecto a las causas de la inflación actual. Las discusiones y las escuelas parecen una fotocopia ajada de una mala foto de 1975. De hecho, algunos de los que opinan hoy estaban en la foto original.

Quiero creer que en el mundo se aprendió algo en los últimos 35 años sobre cómo controlar la inflación. Y cuando digo el mundo me refiero a países similares a Argentina, que en los 70s tenían problemas de inflación y hoy ya nos los tienen...El mundo cambió...Esto me debería hacer creer que los economistas vernáculos también aprendieron algo, habiendo juntado datos de un par de hiper y de varios procesos inflacionarios y de las políticas que se tomaron al respecto, del Rodrigazo a esta parte. Quiero creerlo, pero por momentos sospecho que no, que siguen reinventando la rueda y explicando todo como otro caso más de la excepcionalidad argentina (aquella hipótesis según la cual las teorías que explican el comportamiento de otras economías no pueden explicar el comportamiento de la nuestras).


jueves, marzo 11, 2010

Petróleo en Argentina

El tema energético, como tantos otros, sufre en nuestro país las consecuencias de varios años de políticas desacertadas, de corte populista, descoordinadas y basadas en un enorme desconocimiento de los más básicos conceptos sobre este tema. Que ahora estemos importando nafta no es sorprendente luego de años de mantener el precio de la misma muy bajo (por las razones que sean), de desalentar la exploración aplicando un precio máximo al crudo de exportación, de hostigar a las empresas privadas y de forzar el ingreso de amigos del poder (seguramente muy respetables en sus negocios de origen, pero que de petróleo no saben demasiado) en YPF.

Este tema no mejorará en los próximos años. Por un lado, el precio del petróleo se mantendrá elevado. Además, al no ser Argentina un país de grandes reservas, solamente mediante la liberación del precio del crudo se generarán incentivos para una mayor exploración, tanto en las áreas actualmente existente (donde pinchando más puede encontrarse reservas adicionales), como en nuevas áreas y en el off shore. Eso llevará años y miles de millones de dólares de inversión antes de que rinda frutos...

Pero hay otro problema mucho mayor relacionado con la forma en que está estructurado el sector del upstream petrolero en nuestro país. A pesar de que YPF se privatizó, lo que mejoró sustancialmente su capacidad de generar valor y su productividad, siguió siendo hasta el día de hoy el jugador dominante en el upstream: más o menos el 40% de la producción la realiza esta empresa, seguida por Pan American Energy y Petrobas de muy de lejos. Y el problema de esto es que YPF es una empresa demasiado grande, que no tiene el apetito de riesgo necesario para invertir en una geología con el reducido potencial de la Argentina. Quiero decir, en muchas de sus áreas hay zonas que ameritarían una mayor prospección pero están descuidadas (en parte por la necesidad de sus accionistas de generar caja para pagar la deuda que tomaron con Repsol para adquirir su paquete....).

Una configuración distinta mejoraría este panorama: dividir el upstream de YPF en pequeñas empresas autónomas, con mucho mayor apetito de riesgo y cuyo negocio sea arriesgar para ganar....Me imagino el perfil de las llamadas "junior", en general canadienses o yanquis, montadas por tipos con décadas de pozo, financiadas con capital de riesgo y con un perfil mucho más emprendedor que YPF. Cada una de estas empresas, quizás 10 veces más pequeñas que YPF, se enfocaría en un área o subárea y, por definición, tendría más incentivos a maximizar la producción de la misma y a asegurarse de explorarla hasta el último cm2. Quienes conocen de la industria saben que algunas empresas de este estilo ingresaron en Argentina en los últimos años, invirtiendo cientos de millones de dólares en los márgenes de áreas que YPF tenía relegadas, pincharon cientos de pozos y encontraron reservas que YPF daba por inexistentes.

El Estado no es una solución: revisando la historia de la producción petrolera en Argentina, es fácil ver que la misma tuvo tres períodos de fuerte crecimiento; y entre esos períodos hubieron años y décadas de letargo productivo. Los tres saltos se dieron a principios de la década del 30, en los años de Frondizi (cuando se pasó de 5MM de m3 a casi 15MM) y en los 90s (de 25MM a 45MM). En todos los casos esos crecimientos estuvieron asociados a la participación de capital privado (a veces solos, a veces junto a YPF). Por el contrario, la década peronista y los casi 20 años del 72 al 91 muestran un estancamiento productivo increíble (se osciló entre los 23 y los 27 MM de m3). Pero en el imaginario colectivo de cierto mundillo nac&pop, azuzado por gente que nunca vio una gota de crudo en su vida, la YPF de esos años era una maravilla, cuando en realidad era un elefante técnicamente sólido pero desastroso como gestor de activos, que hacía mal lo único que tenía que hacer bien que es producir más petróleo....y todo esto teniendo como consecuencia la necesidad de importar crudo...

El país no necesita por ende, una ENARSA; ni una YPF gigante: necesita decenas de petroleras chicas, con hambre y capital de riesgo. Para ello, por supuesto, necesita de estabilidad de reglas de juego y gobiernos sensatos: deberemos esperar 18 meses al menos para ello.

miércoles, marzo 10, 2010

La excusa perfecta

La inflación se le está yendo al cuerno al gobierno, y, para variar, no tienen remota idea sobre cómo frenarla. Y las ideas que existen las rechazan como los nenes caprichosos que después de jugar y dedejar todo patas para arriba se niegan a ordenar el quilombo resultante. El costo político que le dicen...

Pero como estos abogaduchos son muy propensos a citar autoridades para justificar sus pobres ideas, les regalo una cita de Keynes que quizás los anime a tomar el toro inflacionario por las astas:

“Lenin is said to have declared that the best way to destroy the Capitalist System was to debauch the currency. By a continuing process of inflation, governments can confiscate, secretly and unobserved, an important part of the wealth of their citizens. By this method they not only confiscate, but they confiscate arbitrarily; and, while the process impoverishes many, it actually enriches some. The sight of this arbitrary rearrangement of riches strikes not only at security, but at confidence in the equity of the existing distribution of wealth. Those to whom the system brings windfalls, beyond their deserts and even beyond their expectations or desires, become ‘profiteers,’ who are the object of the hatred of the bourgeoisie, whom the inflationism has impoverished, not less than of the proletariat. As the inflation proceeds and the real value of the currency fluctuates wildly from month to month, all permanent relations between debtors and creditors, which form the ultimate foundation of capitalism, become so utterly disordered as to be almost meaningless; and the process of wealth-getting degenerates into a gamble and a lottery.”

Lenin was certainly right. There is no subtler, no surer means of overturning the existing basis of society than to debauch the currency. The process engages all the hidden forces of economic law on the side of destruction, and does it in a manner which not one man in a million is able to diagnose.”

LAS CONSECUENCIAS ECONOMICAS DE LA PAZ, es el libro de donde saqué esta cita.

lunes, marzo 08, 2010

La cara más famosa del mundo


Finalmente, no fueron los italianos, ni los chinos, ni los ingleses los que impusieron el uso del papel moneda. Fueron los norteamericanos. Lo cual no es tan sorprendente dada la crónica escasez de monedas metálicas que había en esa región desde siempre.

Y el principal responsable de esta creación no fue un economista académico ni una persona proveniente de las clases más acomodadas. Ni siquiera fue alguien con una formación que haya superado los dos años de escolaridad formal. Pero fue una de las mentes prácticas más prodigiosas de su época, un empresario exitoso. Estoy hablando de Benjamin Franklin, y creo que con la historia que les contaré entenderán por qué su cara adorna los billetes de 100 verdings....

Ben era el hijo menor de un fabricante de velas y jabones. Como tal, a los diez años el padre dio por concluída su educación formal y lo instruyó en ese oficio. Por razones que desconozco pero imagino, a los dos años Ben dejó tan glamorosa profesión y se fue a trabajar con un hermanastro suyo como aprendiz de imprentero. Este laburo, producto de una casualidad familiar, tuvo consecuencias fenomenales en la historia posterior de Benjamín, de las colonias inglesas de norteamérica y del mundo en general. Porque trabajando de impresor, Franklin desarrolló su gusto por la lectura y se educó en múltiples temas.

Pronto se independizó de su hermanastro y se mudó de Boston a Filadelfia donde puso su propia imprenta. Y no solo siguió leyendo sino que también empezó a escribir. Y fue así que a los 23 años publicó un folleto sobre las bondades del papel moneda. Filadelfia venía imprimiendo algo de papel moneda cuyo respaldo eran los bienes o los impuestos futuros de quienes pedían ese dinero prestado. Este papel tenía fecha de vencimiento en seis años, pero Ben observó que su emisión había mejorado sustancialmente la actividad económica de la ciudad. En su folleto Ben hizo una defensa de la conveniencia para las colonias de seguir emitiendo billetes. Este es un documento cuya lectura debiera ser obligatoria para muchos gobernantes, y por qué no para varios de sus asesores no economistas, dada la claridad con que Ben explica las bondades y riesgos de la emisión, aún cuando esté a veces equivocado. Ben dice que no son las leyes ni las tipos de cambio fijos entre el papel y las monedas de oro y plata los que definen el valor del papel moneda, sino la cantidad emitida del mismo en relación al volumen de comercio. Un exceso de billetes causa, obviamente, su depreciación....Esto es así porque el valor del oro y la plata no es permanente. Para subsanar esto propone que los billetes sean respaldados por la tierra de la colonia, la cual tiene un valor menos fluctuante y cuya cantidad es fija. Aquí me detendré para desviarnos de la historia.

Las colonias tomaron el consejo del folleto al pie de la letra y se lanzaron a imprimir su propio papel moneda. La imprenta de Franklin fue una de las que imprimió estos billetes; de hecho Ben Franklin creó una técnica para dificultar las falsificaciones (nunca dejó de ser, por sobre todas las cosas, un gran artesano y empresario). Pero los ingleses que controlaban estas regiones no estaban tan convencidos sobre este tema, porque veían en esto un avance de las colonias en un derecho que correspondía a la autoridad colonial. Entonces, en 1751 prohibieron la emisión de papel moneda en Nueva Inglaterra y luego en las 13 colonias. Franklin, un tipo emprendedor, se fue a Inglaterra a pedir al Parlamento que levantara esa prohibición. Allí argumenta que las colonias no pueden depender para la emisión de billetes de las reservas de monedas de oro y plata, como si lo hacían los europeos, pues la oferta de esas monedas no se podía controlar siendo una colonia. Por ende las colonias necesitaban emitir "fiat money" (moneda fiduciaria), no relacionada con las reservas de oro y plata.

Les dejo para su curiosidad aprender más sobre un tipo que fue inventor, jugador de ajedrez, diplomático, escritor, revolucionario, diplomático y muchas cosas más. Vale la pena.

viernes, marzo 05, 2010

El primer inflacionista

El amigo Law de un par de posts atrás, además de manejar el Banque Royale también ayudó a inflar una enorme burbuja a principios del siglo XVIII. Se trataba de la Mississippi Company (o, más precisamente la Compagnie de la Louisiane ou d'Occident), establecida en 1717 bajo instancias de Law para explotar las riquezas de la Luisiana, que entonces era colonia francesa (fue vendida a USA en 1803para pagar gastos de las guerras de Napoleón....pero esa es otra historia).. Piensen que la Luisiana ocupaba el medio oeste norteamericano, desde el Golfo de México hasta casi la frontera con Canadá.

Ustedes se preguntarán el por qué del establecimiento de un "banco central" y de un emprendimiento colonial en la misma época. La razón es sencilla: Francia era un país riquísimo pero casi en quiebra debido a los gastos de las guerras de Luis XIV. En ese contexto la promesa de riquezas americanas y la posibilidad de emitir papelitos para saldar deuda era música al oído del regente de Orleans. Obviamente, el papel moneda era redimible en oro o plata ante al banco, y eso contribuyó a que fuera inicialmente aceptado...Además todos los fondos públicos fueron despositados allí, lo que aumentó su imagen de solvencia. La idea de Law es que no participaran los bancos privados, que las finanzas y el comercio fueran controlados monopólicamente por el Estado.Y que las utilidades de este banco y de la Compañía fueran usadas para pagar la deuda nacional.....¿les suena algo de todo esto? (si, las pelotudeces actuales son en realidad, aparte de dañinas, anticuadas.....)

Para fines de 1718 el Duc d'Orleans compró todas las acciones del banco, y Law fue nombrado Controller General de las Finanzas (una especie de secretario de Hacienda)

Pero en realidad todo esto era un habilísimo esquema para esquilmar giles y favorecer al rey. Los directores de la Compañía contrataron vagabundos y desempleados, los disfrazaron de mineros y los hacían marchar por Paris como si hubieran regresado de Luisiana llenos de guita. Artistas pintaban escenas de Nueva orleans como si fuera Paris (era un caserío bastante paupérrimo). A quienes desearan invertir en la Compañía el Banque Royale les daba préstamos en papel moneda que podían usar para conmprar esas acciones. Además se podían comprar acciones pagando sólo un anticipo del 10%....Esto despertó el entusiamo de mucha gente que invirtió sus grandes o pequeñas fortunas para poder ganar algo de tan fabuloso negocio

Con ese papel moneda, la Compañía pagaba sus falsos dividendos. Una bicicleta afinada con precisión francesa....Pero como toda bicicleta con moneda fiduciaria, esta pronto generó problemas: el banco en menos de un año emitió papel por el doble de las reservas de metálico de toda Francia, lo que obviamente hacía que ese papel no tuviera suficiente respaldo. Esto hizo explotar lo que luego se conoció como la Burbuja de Mississippi en 1720. Los inversores reclamaron que se les devolviera el oro a cambio de sus billetes en las puertas del banco, lo que era obviamente imposioble a esa altura. Law huyo a Inglaterra donde murió en 1729. Toda la burbuja duró menos de tres años y dejó un tendal de arruinados.

Pero no solo la monarquía cayó en la tentación de emitir para saldar sus deudas....

De crispaciones y crispados

La situación política actual me tiene podrido. Es como ver por tele los caprichos de un nene veleidoso que no se dio cuenta que perdió al metegol y no quiere dejar jugar al que le sigue en la fila. Y detesto la deshonestidad intelectual de los que, para distraer la atención, le echan la culpa a la oposición (que es pedorra y errática) por la "crispación" actual. En cualquier otro país del universo conocido (y probablemente también en realidades cuánticas paralelas), si un presidente le toma el pelo a la Asamblea Legislativa un día y al otro amenaza con no cumplir con un fallo judicial, la sociedad, los medios, la justicia y hasta el asociación de criadores de lombrices largas lo ponen en caja rápidamente, y el individuo en cuestión se amolda a la realidad que le toca sufrir. Si se tratara de un gobierno que perdió claramente las últimas elecciones y cuya popularidad viene en picada, este tipo de actitud serían rápidamente atribuibles a alguna seria debilidad del carácter o a un problema profundo en la personalidad del presidente.

La crispación es la reacción de los que ya saben que están perdidos pero no se resignan a aceptarlo. Como los hinchas de Racing, por ejemplo. Pero al menos, la hinchada de Racing parece más madura que algunos dirigentes políticos del oficialismo.

PD: todo esto se veía venir, cuando el Gobierno se mofaba de la oposición y la ninguneaba. Como todos los bobos que se hacen los cancheros hasta que se encuentran con alguien que los ubica. La sobriedad y el respeto son valores que cualquier persona educada sabe que pagan. Y con educada me refiero a gente que entiende como pararse en la vida, no a tontos que tardan seis años en recibierse de abogados con notas mediocres......

Y volviendo al papel....

Gutemberg facilitó la impresión en serie de libros, panfletos, periódicos y, como era de esperar, de papelitos pintados con un valor nominal. ¿Quiénes fueron los primeros en aprovechar esto? NO, no fuimos los argentinos, ni los nigerianos, sino los suecos: en 1661 el Banco de Estocolmo emitió el primer billete bancario de Europa, ante una escasez de monedas de plata. Los pobres suecos nunca tuvieron mucha plata, pero les sobraba cobre; una reina de esa época hizo imprimir planchas de cobre de casi 2kg como moneda; y también monedas de cobre gigantescas por valor de 10 dalers (si, si, los "dólares"), de casi 20 kg....se imaginaran que cuando a los comerciantes les ofrecieron billetes de 100 dalers a cambio de 5 de esas monedas o 200 de esas planchas, no les fue muy difícil aceptarlas, porque andar llevando ese peso encima era bastante engorroso.

Luego en 1694 se creó el Banco de Inglaterra, uno de cuyos fines era imprimir papel moneda, para que las reservas pudieran mantenerse en una cuenta bancaria. Este banco lleva 316 años imprimiendo billetes en forma continua.

Y así llegamos a John Law, un escocés, rico, fachero, economista aficionado, apostador empedernido y condenado por asesinato en su país, que en mayo de 1716 fue nombrado presidente del Banque Générale, creado a imitación del Banco de Inglaterra. Su rol era el de recaudar y admistrar los fondos de la deuda del estado francés. Law se dedicó inmediatamente a emitir billetes supuestamente respaldados por las reservas de oro del banco.

A los dos años, el regente de Francia (el rey Luis XV era aún menor de edad), se hizo cargo del banco y lo renombró Banque Royale. Law siguió de director general, imprimiendo billetes con la fruición de un peronista. El tipo además ya había sido nombrado duque de Arkansas, entonces parte del Imperio Francés.....mañana sabrán como termina esta historia, pero acepto apuestas.

Me voy siete días...

...y el gobierno (?) hace el milagro de empeorar lo inempeorable...

Tengo una prueba ácida: hace unos 5 años atrás, Duhalde me parecía un bobo, Redrado un pedantón sin contenido y Carrió una loca de atar.

Hoy, comparados con el elenco oficial, Duhalde parece De Gaulle, Redrado parece JMK y Carrió....una loca de atar....

Pero si me empieza a gustar Carrió vs estos desnortados, ahí si que estamos en el HORNO